Ella… Mi realidad era perfecta, una niña de familia con una vida maravillosa y planes bien delineados para el futuro. Tenía el mundo a mis pies, pero el destino siempre nos depara sorpresas. Lo aprendí de una forma trágica, vestida de blanco y esperando en el altar a un novio que nunca se presentó. Me aferré a lo único que tenía a mano: mi sobrina recién nacida, huérfana de madre. Hice ese papel durante cinco años, hasta que mi hermano decidió quitármela. Y ahora… ¿qué será de mi vida? Solo veía una solución. Decidí llevar a cabo mis planes… Él… Cantar es mi vida. Lo cual implica viajar, por eso nunca estoy en un mismo lugar más de una semana. Soy famoso, lo sé… y la gente suele suponer que eso es maravilloso. No es así, la soledad es espantosa, e intento sobrellevarla de la única forma que conozco: el sexo. De gira por Sudamérica la vi sentada en la barra del bar de un hotel en Paraguay. Era preciosa, una de las mujeres más hermosas que había visto en
Libros, libros y más libros.