Sophie necesitaba un descanso, un respiro. El acoso de sus padres para que se uniese a su bufete de abogados la tenía al borde de la locura, sobre todo cuando su pasión era el diseño de interiores. Trabajar las formas, los colores, las texturas era lo único que deseaba hacer en su vida. Si tan solo pudiera vivirla en paz, sin la presión y las llamadas inagotables de sus padres para que ejerciera una profesión “seria” y dejara de “jugar” a ser diseñadora. Por eso una tarde y con la mala influencia de su asistente y amiga, decide escaparse a Londres. Su intención era pasar unas vacaciones en paz y divertirse con sus amigas pero un inglés de ojos aguamarina y sonrisa sincera le robó el aliento desde el primer momento. Adrien solo quería tomarse un par de tragos en el pub después de una tarde terrible en el trabajo. Él, un tipo sencillo y discreto que trataba de pasar desapercibido y sin hacer mucho escándalo a pesar de su relativa importancia en la...
Libros, libros y más libros.