Mi nombre es Alexa Miller y según mi padre dice, soy una aspirante a puta. Tengo veinte años y él me ha vendido, no es que pretendiera que fuera un padre modelo, pero tampoco esperaba lo que me hizo. Lo odio de una manera incontrolable, pero la odio más a ella por dejarme con este animal.
Soy Christopher Collins y se puede decir que soy un desquiciado. Tengo todo lo que quiero o eso es lo que piensa la gente, pero la realidad es que la soledad no se llena con montañas de dinero en el banco. Hice un trato con un hombre y lo he cobrado. Lo que nunca pude imaginar fue lo que me costaría a mí el cobro de esa deuda.
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